Gracias a la vida que me ha dado tanto… así inicia la canción que se engendró sin duda en el corazón de la chilenisima Violeta Parra, para luego embrionarse en su mente hasta el nacimiento del cual todos disfrutamos, en las voces de Alberto Cortes, Mercedes Sosa entre otros grandes.
Hoy no me apropio del concepto, mas me adhiero a la gratitud, que considero no es propiedad reclamable de ningún individuo y es que me niego a dejar prisionero en mi interior, el decir gracias, cumpliendo el deseo de lanzarlo hoy cual grito impreso en el corazón de esta pagina, agradeciendo especialmente por:
- Los momentos difíciles, pues han hecho que mis amigos se conviertan en hermanos.
- Por las enfermedades, que me permitieron entender, la importancia de las pausas en la vida, recordandome en un excelente momento, que un saludable existir, es siempre una buena idea para implementar, no importa la edad ni el tiempo, aunque entre antes mejor.
- Agradezco las pérdidas, pues me han hecho valorar con mas fuerza lo que tengo y he logrado.
- Por mis temores, pues unas vez vencidos me han convertido en alguien mejor y mucho mas fuerte
Y una vez aprendo a agradecer y valorar experiencias, como las anteriores, las demás son simplemente mas allá de lo fantástico.